Mi curiosidad por el universo del vino, cada dia va a mas, y en este caso, hace como un mes, volví a descubrir la AOC de Limoux y sus Blanquettes, Cremants y vinos. Contacte con Chez Guinot de Limoux, y empezamos a colaborar para dar a conocer por estas tierras, tan cercanas a su terrotorio y sus vinos, que aunque esten al otro lado del Pirineo, en la región de Audé, tanto Limoux como sus delicias son desconocidas por el publico español. Como breve introducción a los Cremants y Blanquettes, el Blanquette tiene como protagonista principal en su elaboración, la variedad de uva autóctona "Mauzac" y además puede utilizar en pequeñas cantidades otros tipos de uvas, el Blanquette ancestral, solo utiliza Mauzac, exclusivamente. El Cremant de Limoux utiliza ya, un amplia gama de variedades para su coupage. En lo que a sus historia y tradición hay dos datos importantes que destacar sobre Limoux y sus esencias. El Blanquette esta considerado el espumoso del mundo, puesto que en 1531 los monjes de la abadía benedictina de Saint-Hilaire empezaron a elaborarlo. Además, de ser años mas tarde, en los años 30 del pasado siglo, uno de los primeros espumosos incorporados en las AOP, AOC de Francia. En esta primera entrada, comentaré la experiencia sentida con el Crémant Impérial Tendre Rosé.
El Crémant Impérial Tendre Rosé esta elaborado con un coupage de 60% Chardonnay 20% Chenin blanc y 20% Mauzac y Pinot noir. En copa, se presencia un color marronaceo , con toques amarillos muy oscuros, transmite edad, este cremant se deja envejecer 5 años sobre sus propios posos ( sin filtrado) lo que le aporta esa cremosidad y tonalidad que te hace notable en vista y paladar. En boca es un equilibrio diferente a matices de frutas rojas y ciertas notas secas y ligeramente agrias, que aportan en paladar un matiz "diferente" pero a la vez muy interesante para los que estan acostumbrados a los espumosos mas clásicos. Denota esencia de una tradición que le hace diferente a todo lo que uno puede haber degustado anteriormente. Una experiencia cautivadora, y en este caso, maridada a la perfección con un queso de Pesto, que encaja a la perfección con la "sencilla complejidad" del Crémant Impérial Tendre Rosé. Este espumoso es el ejemplo de que mas allá de lo clásico, existen miles de historias en cada terroir, y Limoux es un cumulo de historia y buen vino. Salud!
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