lunes, 12 de septiembre de 2016

Credo by Stellenbosch Vineyards; un delirio vinico hecho con mucha clase.

La vida te suele llevar a conocer a gente que siempre te aporta, y ya hace unos
meses, conocí a un maestro del mundo del vino que me abrió el prisma de un mundo que desconocía, el vino de Sudáfrica. Sudáfrica es un complejo universo vínico, donde se elaboran curiosos e interesantes vinos , y el gran maestro Guy Kedian de Stellenbosch Vineyards, me descubrió un pais y concretamente una región, Stellenbosch que tiene el encanto de la fusión de una tradición y unas ganas de innovación constante. El vino que gracias a Guy he podido volver a disfrutar de nuevo, esta vez con mi entorno habitual, es el Credo, elaborado con un coupage bastante curioso: Merlot, Shiraz y Viognier.
Un vino con ADN, una expresión única de un concepto, y un embajador sublime del "savoire faire" del vino de Sudáfrica. 
Un vino de profundo granate, brillante y expresivo, en nariz es un festival de fruta y especies, armonía de canela, ciertas notas de vainilla y curry. En el fondo de nuestros sentidos aparece el chocolate y la fruta roja seduce con un extremo y profundo aroma a grosella, cassis y mora. En boca es un vino estructurado y profundo, de paso largo y completo que pasa por nuestro paladar expresando la armonía de frutas especies y amables tostados. Elegante y sutil, redondo y autentico, con una clase que sorprende a aquellos que al leer la etiqueta, se pueden llegar a asombrar del coupage que presenta. Muy recomendable para descubrir y espectacular para sentir y disfrutar. Genial!

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